viernes, 25 de noviembre de 2011

LA VIDA DE UNA ADOLESCENTE

I
-Date prisa Amy, vas a llegar tarde a tu primer día de clases en la preparatoria, grito desde su cuarto mi mamá.
Volví a lavarme la cara para quitarme cualquier resto de de pasta dental, regrese a mi cuarto y me vestí. Me puse las botines plomas que me regalo Jack, mi hermano, y un vestido azul, un chal y una boina ploma que me regalo mi madre por el día de mi cumpleaños, que todavía no había estrenado.
Cuando fui al cuarto de mis padres, mi papá se quedo mirándome. Su rostro se entristeció repentinamente.
-si-dijo-, estas muy linda… ¡oh, sí Amy, estas preciosa! Ya no eres mi niña de ayer, ahora eres toda una señorita, que va a la preparatoria.

Viviane, mi madre, me miró y eligió un pincel de un grupo que había en un vasito: lo restregó en un bote de crema roja y me pinto la boca, dibujándome primero el contorno de mis labios y rellenándolos luego con rápidas y cuidadosas pinceladas. Cogió una borla para polvos y me la froto en las mejillas, los extremos superiores de las orejas y la barbilla, finalmente cogió un collar de perlas y me la puso en el cuello, levantándome el pelo por detrás para cerrar el broche.
-se que puedo confiar en, querida, porque ya eres una chica mayor, ya eres una adulta, y y debes portarte bien en la prepa, ya no eres una niña...
- si-, mama lo se… hoy es mi primer día en la prepa, conoceré a nuevos chicos, y tendré nuevos amigos; por eso quiero pedirte que me prestes las llaves de tu coche, todos llegaran en su coche por favor mamá, no te defraudaré.
Mis padres hablaron un rato y me dijeron:
-no- pero no te preocupes Jack, te llevara en su coche
-pero mama, porque me hacen esto.
-que te estamos haciendo, Amy, eres nuestra hija y nos preocupamos por ti.
En camino a la pre Jack pasó por su amigo desde la infancia, Alexander. Cuando llegamos a la pre todas las chicas llegaban en su propio coche, y yo con mi hermano, hasta Lya, mi mejor amiga, llego en su propio coche que le regalo por su papá por su cumpleaños.
-¡hola! Lya
-¡hola! Amy, ¿como estas?
-no tan bien como tu, yo vine en este coche con mi hermano y su amigo…
-¡hola! Jack, dijo Lya, hace tiempo que no te veía, como has estado bebé!
Jack le respondió sarcásticamente: -la bebé eres tú, Lya.
-pero tengo 17, le grito alterada.
Jack se comenzó a reír con Alex y se fueron. Lya desde muy niña a estado enamorada de el, pero, Jack siempre le ha dicho que ella es como su hermana menor.
-Amy, vanos al salón, vamos a llegar tarde.
-si-vamos, dije.
Corrimos pero igual llegamos tarde, la miss nos dijo que de castigos teníamos que quedarnos en la tarde a limpiar las motas.
A la salida Jack no me espero por que salimos mas tarde por el castigo, pero Alexander si.
-¡hola Amy!, podemos hablar.
-ahora no puedo, Lya me va a llevar a casa, chau Alex.
Estábamos llegando a casa cuando Lya voltea, me mira sonriendo y me dice:
-Amy, Alex esta enamorado de ti.
-claro que no, le dije.
-si!! No viste la cara que puso cuando le dijiste que no podías, se puso triste.
-como crees, soy la hermano menor de su mejor amigo, como dice mi hermano “somos unas bebés “, tu crees que el se figaría en mi, en una bebé.
Cuando llegué a casa mi mamá le estaba gritando a Jack por no esperarme, yo aproveché ese momento y dije:
-mamá, vez por eso es mejor que yo vaya en tu coche y Jack en el suyo.
-Está bien –dijo- veo que eso es lo mejor.
Subí a mi cuarto, me bañé y me puse hacer mis tareas, pero no me concentraba, solo pensando en lo que me dijo Lya, Sera verdad, Alex estará enamorado de mi.
-Amy, te llaman por teléfono, es Alex,-grito mi mamá-.
Baje y contesté el teléfono:
-¡halo!
-¡halo! Amy.
-hola Alex, ¿Cómo estas?
-bien, quería hablar contigo, puedes salir un rato al parque de tu casa.
-si claro, pero voy a pedir permiso, nos vemos en 1 Hora.
-mama voy a salir un rato al parque de aquí a la vuelta, sí.
-¿para que hija?
-Es que Alex quiere hablar conmigo.
-¿Quién Alex? ¿El amigo de Jack?
-si mamá él, ¿puedo salir? -
-sí pero no tardes -
-si mamá, chau
Abrí la puerta, y me fui al parque, en el camino me puse a pensar, de que querrá hablar conmigo.
-Amy!!! A lo lejos escuche gritar a Alex,-hola Amy.
-¡hola Alex! ¿De que quieres hablar conmigo?
-mira Amy, ya no eres una niña, y yo desde hace tiempo estoy enamorado de ti, me gustas mucho. Se lo dije a Jack, pero el me dijo que eres una bebé y que tu no te figarías en mi, pero yo no puedo dejar de pensar en ti, todas las noches sueño contigo.
-Alex, dije alterada, quien te ha mandado a que me hicieras esta broma, Jack mi hermano. –tuve que cerrar los parpados con fuerza para poder contener las lagrimas.
-No Amy, lo que te dijo es cierto, yo te quiero mas de lo que te imaginas
-pero como vas a estar enamorada de una bebe como yo, le grite y Salí corriendo a mi casa.
Subí a mí cuarto corriendo y me encerré allí a llorar, mi mamá preocupada subió y tocó la puerta diciéndome:
-cariño!!, que paso, que te hizo
-nada mamá, le grite
-pero ábreme la puerta hija para hablar.
- no paso nada, Alex se burlo de mi...
-porque hija, que paso, que te dijo.
Le abrí la puerta y le conté: -el me dijo que yo le gustaba, que me quería y que estaba enamorado de mi.
-por eso lloras cariño, pero si el te dijo eso es porque esta enamorado de ti
-pero mamá no entiendes el solo lo dijo para burlarse.
-cariño, Amy, tu eres muy bonita, eres hermosa, como no se va a fijar en ti, si eres preciosa.
Cuando mama me dijo eso acariciándome la frente, cese de llora y me quedé dormida como solía hacerlo cuando yo era niña.








II
A la mañana siguiente no quise ir a clase, le dije a mi mamá que me sentía mal y que me quería quedar en casa. No se opuso, pero me dijo,- no voy a poder a acompañarte porque tengo que ir al trabajo, diciendo me esto se despidió con un beso y se fue.
En la tarde, después de clases vino Lya preocupada por que no había ido a la pre y me dijo
-Amy, porque no fuiste a clases hoy, ¿Qué paso?
-Nada, me sentía un poco mal.
-eso fue lo que me dijo Jack, por eso vine a verte, además porque Alex me pidió que viniera, ¿Qué paso ayer? El me contó que te dijo lo que sentía por ti, pero tú te molestaste y te fuiste corriendo. ¿Por qué lo hiciste?
-es que el dijo eso para burlarse y me enfureció que lo hiciera.
-Amy, yo hable con el y me dijo que es enserio lo que te dijo, todo, es verdad.
En ese momento sonó el teléfono y le pedí a Lya que ella lo contestara.
-Amy, grito, es Alex quiere hablar contigo.
-dile que no quiero hablar con el y que nunca me vuelva a llamar porque no le voy a contestar.
-pero, Amy, dijo asombrada, él te quiere.
- no me importa, yo no siento nada por él.
Lya se molesto conmigo y me dijo -cuando cambies de opinión me hablas -y se fue.
Al rato llego mi hermano y me dijo lo mismo, que Alex me quería, pero yo le dije -no quiero nada con él, dile a tu amigo que no me hable porque yo lo voy a ignorar.
Aquella noche no pude dormir pensando en lo que todos me decían de Alex, que el me quería, pero también en lo que decía mi hermano que “yo era un bebé”. Estaba totalmente confundida, no sabia que pensar, si en verdad Alex estaba enamorado de mi o no.




III
Estaba terminando de vestirme cuando sonó el teléfono. Era Lya.
-Amy, puedes pasar por mí en camino a la pre, por favor
-de acuerdo, le dije.
Me despedí de mi mamá con un beso y me fui. Pasé por Lya en camino a la pre y le pedí que antes de subir al coche me prometiera que no me hable más de Alex. Primero se opuso, pero luego llego a prometerlo.
La chica nueva llego a quinta hora. Comunicación. Los chicos se frotaron las manos. Las chicas se mostraron indiferentes. Yo... bueno, Lya y yo no somos como ellas. Así que en la hora de recreo hablamos con ella, con Daniela, le dijimos: -Oye, Daniela si quieres puedes ser nuestra amiga.
Ella muy tímida, nos dijo: -si ustedes quieren, si. Y comenzó a reírse.
En la tarde fuimos a mi casa para hacer un trabajo que la miss de comunicación había pedido, teníamos que crear una historia en grupos de 3, todas las tardes después de clases íbamos a mi casa. En una de ellas, Daniela conoció a Alex, que había ido a casa a hacer un trabajo con Jack. Ella se presento muy coqueta con el, yo no estaba celosa solo me molesto que se presentara así, parecía muy creída.
Después de una semana que terminamos el trabajo y se lo presentamos a la miss. Un sábado Daniela nos invito a Lya y a mí a una pijamada en su casa. Estuvo muy bonito, hasta que ella dijo hay que hablar de chicos.
-Amy empieza tú, ¿Quién te gusta?
-no me gusta nadie.
-bueno, entonces tu Lya ¿Quién te gusta?
-me gusta el hermano de Amy, Jack.
-ahora tu, Daniela ¿Quién te gusta?, dijo Lya
-a mi me gusta, el amigo de Jack, Alex
-yo dije alturadamente, como te va a gustar él, si no lo conoces.
-lo se, pero acaso ¿tiene enamorada?
-no, pero…
-pero ¿qué? Acaso estas celosa Amy, acaso a ti te gusta, me reprocho Daniela.
Yo estaba muy nerviosa cuando me pregunto esto y le grite: -Si, me gusta mucho y estoy celosa de que hables de él, sin conocerlo.
Daniela enfurecida nos hecho de su casa y nos digo: -esto no se va a quedar así.
Cuando llegué a casa mi mamá preocupada me pregunto: -cariño, que haces aquí, ¿Qué paso con la pijamada en la casa de Daniela?
-nada mamá, Daniela se molesto conmigo y nos hecho.
-¿Por qué se molesto?
-por que le grite que me gusta Alex, cuando ella dijo que le gustaba Alex.
Mamá emocionada me dijo: -enserio te gusta Alex.
-Si mamá me gusta, pero no quiero que el se entere, porque yo lo trate muy mal cuando el me dijo lo que sentía por mi. Pero ahora yo soy la que esta enamorada de él.








IV
Los domingos mis papas y Jack desayunan tarde, así que desayune sola en la cocina y me fui al parque a caminar y pensar. Allí me encontré con Lya y me dijo:
-hola, Amy
-hola, Lya – dije Yo.
-¿Cómo estás esta mañana? –me preguntó.
-No lo sé –le respondí, aunque temía que mi respuesta sonara a estúpida, pero pensaba que tenia que ser siempre honesta con mi mejor amiga.
Empezamos a caminar juntas y me pregunto:
-¿te gusta Alex?
- uhm… Si –dije-. Más que nadie desde la primera vez Jack lo llevo a casa, pero no lo quise admitir por que pensaba que el solo se burlaba de mí.
- tú también les gustas a el –dijo Lya-.
Nos dirigimos por el Centro Comercial hasta la fuente de soda. Allí nos encontramos con Jack y con Alex, Lya los llamó y comenzamos a hablar los cuatro. Luego Lya y Jack propusieron que vayamos al cine a ver una película que estaba de estreno “Crepúsculo” al finalizar la película ella y mi hermano se fueron a hablar aun lado y nos dejaron solos a Alex y a mi.
Alex y yo nos miramos a los ojos y nos sonrojamos. Yo estaba muy nerviosa, mi corazón latía a mil por horas y sentía que en mi estomago avían mariposas revoloteando, me sentía muy feliz estando a su lado. Pero de repente tuvo que aparecer Daniela, muy coqueta ella, dijo: -hola Alex, Hola Amy, que hacen aquí solos.
-Nada, solo estamos esperando a Jack y a Lya –le respondió Alex secamente-.
-Alex puedo decirte algo.
-Si, claro dime.
-Alex desde que te conocí, yo me enamore de ti, me gustaste desde el primer día que te vi en la casa de Amy.
Alex me miro y le dijo: -Daniela, yo… no se que decirte, pero yo estoy enamorado de Amy y no puedo corresponderte, lo siento.
Ella muy alterado dijo: -nadie me rechaza a mí y se fue corriendo y llorando.
Yo estaba sonrojada y nerviosa por lo que había dicho, Alex me miro y me dijo: -Amy, mírame lo que digo es cierto, yo te quiero, me gustas mucho y quiero que seas mi enamorada.
Estaba muy feliz pero a la ves muy nerviosa , no sabia que decir, nunca antes me habían pedido que sea enamorada de nadie, nunca pensé que seria tan bonito enamorarse, así que le dije: -No se como decírtelo, pero, Si, si quiero ser tu enamorada…
Al rato vino Lya y Jack, ella gritando: -Amy, Amy, Amy ya soy la enamorada de Jack…
-yo también ya soy enamora de Alex –le dije muy feliz-.
Cuando llegamos a casa mamá y papá nos esperaban, muy preocupados y molestos nos preguntaron: ¿Dónde han estado hasta estas horas de la noche?
Jack y yo dijimos: -estábamos con Lya y Alex en el centro comercial.
Lya muy emocionada dijo: -yo ya soy enamorada de Jack y Amy ya es enamorada de Alex…
Mis padres muy contentos nos felicitaron. A partir de ahí mi vida cambio. Y la de él también.
Los cambios comenzaron, Lya y Jack; Alex y yo, los cuatro salíamos a menudo a pasear, Jack ya no me decía que era una “bebé”, pero a Lya si le decía: “Mi Bebita”…

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